Anoche vi en un noticiero nacional la declaración del vocero de Seguridad de Nuevo León Aldo Fasci sobre que el adolescente Federico Guevara Elizondo, el joven de 15 años que disparó contra su maestra y compañeros en un salón del Colegio Americano del Noreste en Monterrey, recibía tratamiento por problemas psicológicos, al parecer «un cuadro depresivo«.

Aún no se dice de dónde sacó esa información que en mi opinión debe ser esclarecida o por lo menos contextualizada ya que la población puede inclinarse a pensar que cualquier persona con «un cuadro depresivo» puede con facilidad tomar un arma y meterle una bala a su maestra y luego a sus compañeros.
Este no es el comportamiento ordinario de un usuario con Trastorno Depresivo Mayor cuyas características diagnósticas incluyen la culpa y el autocastigo. Lo que es más frecuente es que alguien con depresión opte por quitarse la vida.
Federico Guevara pudo haber padecido depresión sí, pero como resultado de o conjuntamente con otro trastorno. Y en todo caso, es posible que su depresión presentase elementos psicóticos y habría estado siendo tratado por en Cuadro Esquizoafectivo o una Depresión Psicótica.